2/11/12

En México. RIM: Las Reformas no son Magicas.




Para Jacques Rogozinsky las recetas económicas que México ha aplicado no son las adecuadas porque no se han “tropicalizado” a la realidad. El funcionario que privatizó Telmex y Mexicana advierte en su libro “Mitos y Mentadas” que el país debe buscar su propio modelo
 







“Lo que dicen los especialistas es que México no crece porque el problema es que nos faltan más reformas, más reformas y más reformas.”
“Yo no digo que no falten algunas. Pero la pregunta es: si tengo todas las reformas, ¿me garantiza que México crezca?”
En entrevista exclusiva para Reporte Indigo el doctor Jacques Rogozinsky, autor del libro “Mitos y Mentadas de la Economía Mexicana” publicado por Editorial Grijalbo, explica por qué las llamadas “reformas estructurales que necesita el país” no garantizan necesariamente el crecimiento de México.

"Dejémonos de tonterías y de querer hacer paellas si no tenemos azafrán. Mejor hagamos arroz a la mexicana con mariscos, pero no la llamemos paella porque nos falta el azafrán”
"La mayoría de las empresas en Estados Unidos son corporativas. Los dueños no necesariamente manejan la empresa porque van a buscar a los mejores para los puestos directivos”
Jacques Rogozinsky
A través de la metáfora de las recetas de cocina, Rogozinzki explica que nuestro país no crece porque compró una receta que no está hecha para nuestro paladar
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Telmex tenía un 75 por ciento de dominio cuando entraron ATT y MCI a México.
A través de su libro intenta destruir mitos fundados en creencias casi dogmáticas que se han instalado en la mente de los más altos funcionarios del país durante décadas y por eso, lo primero que hace en la entrevista es explicar el por qué del nombre de su libro.
“Los mitos son los que yo quiero desbaratar. Y las mentadas son las que voy a recibir por estar haciéndolo. Que quede muy claro que las mentadas son para mí.
“Y es que estoy poniendo un espejo enfrente al que creía  que estaba esbelto, que estaba muy guapo, y resulta que no.”
Rogozinsky advierte que lo que dice y escribe no es una ocurrencia suya, sino que está debidamente sustentado.
“Lo que señalo en el libro no viene nada más de mi imaginación. Todo lo que digo ahí está sustentado en  muchos estudios y en  muchas pláticas que he  realizado a lo largo de muchos años con gente muy brillante. Desde premios Nobel, hasta académicos, pasando por gobernantes.
“Con toda esa información me puse a conectar los puntos, como dicen en inglés connect the dots, para concluir que México no ha crecido, como lo han hecho otros países,  porque no solamente hemos comprado una receta para la cual no  tenemos los  ingredientes necesarios, sino porque también nos hemos creído algunos mitos”. 
No funciona la receta de Washington
Los ganadores siempre dictan las recetas. Jacques Rogozinski dice:
“Desde las recetas de qué hacer para cocinar hasta las que dicen cómo se debe hacer la política.
“Sus recetas también pasan por la historia y obviamente también por la economía.
“Después de la Segunda Guerra Mundial, los chefs que han hecho las recetas básicamente provienen de  los países desarrollados. De Inglaterra y Estados Unidos, que son los que iban a la vanguardia.
“Nosotros compramos una receta que viene del mundo desarrollado, sobre todo de los Estados Unidos, que es un país ganador y como tal, siempre va dictando la recetas.
“Entonces ellos sacaron, en algún momento dado, junto con el Banco Mundial, con el Fondo Monetario, algo que se llamó el Washington Consensus.
“Y el Washington Consensus básicamente tiene 10 puntitos entre los que se dice que tiene que haber disciplina fiscal, tasas de interés liberalizadas, apertura comercial, inversión extranjera, y privatización. 
“Son una serie de elementos que supuestamente tiene que hacer un país para crecer. 
“Nosotros hemos seguido muchos de esos elementos en nuestra economía. Sin embargo México no crece al ritmo previsto. 
“Esa es la verdad. Y entonces lo que se nos dice, la explicación terminante de muchos analistas, periodistas, y especialistas, es que el país no lo hace bien. No ha seguido la receta de principio a fin.
“Tenemos monopolios. Corrupción. No educamos bien, etc. y si no sigue  la receta al pie de la letra pues obviamente no va a salir el pastel. Eso es lo que dicen los especialistas”.
> ¿Por qué México no creció si aplicó la receta?
“Si fuera cierto que siguiendo al pie de la letra todo este decálogo los países crecieran bien, entonces querría decir que los países que más se acercan a la receta van a crecer más que los países que no se acercan. 
“Pero resulta que muchos países que no nada más no se acercan, sino que violan muchísimos de estos preceptos,  están creciendo muchísimo. 
“No quiero hablar solamente de China porque luego todo mundo dice que China es una excepción. Si hay una puede haber dos. 
“Pero ese no es el caso, hay muchísimos más.
“Tenemos a China, Tailandia, Corea, Indonesia, Malasia, y aquí tengo una lista más. Son como 10 países que han crecido mucho más rápido que México y han seguido menos pasos que México ya tiene. 
“Entonces yo me hice la pregunta: ¿Qué sucede?
“¿Existe algún orden en el que podemos hacer esto? 
“¿Qué otras cosas existen que no estamos tomando en cuenta y hace que se desarrollen estos países y nosotros no?
“Como decía Einstein, con lo que abro este capítulo: No todo lo que se puede contar cuenta, ni todo lo que cuenta se puede contar.
“Entonces puede ser que hay algunas cosas que nosotros no contamos porque básicamente, las escuelas de economía –sobre todo las actuales en Estados Unidos y en Inglaterra–  se dedican a ver qué es lo que se puede contar.
“Y hay cosas que no meten ahí porque no se pueden contar.
“Entonces ahí empiezo a darme cuenta que sí hay grandes diferencias y que cada una de estas diferencias lograrán que crezcamos un poco menos”.
Difieren México y EU en tipos de empresas
Rogozinski explica algunos ejemplos:
 “Por ejemplo, en Estados Unidos, a diferencia de México, la gran mayoría de las empresas son corporativas en vez de familiares.
“Eso es una gran diferencia aunque uno no lo crea, por varias razones.
“Una empresa familiar –y eso está documentado en el libro por gente que ha hecho muchos estudios– generalmente asume menos riesgos.
“La empresa familiar tiene menos avances tecnológicos porque al ser familiar, y si a la empresa le está yendo bien, la gente dice: ¿Y para qué le movemos, si estamos muy bien?
“Además, generalmente tienen adentro a toda la familia metida. Me refiero a primos, hermanos y generalmente no se van a encontrar en los mandos altos de esas empresas a gente profesional o fuera de la familia.
“Eso hace que el esfuerzo que hace una persona en una empresa familiar sea menor porque cualquiera que trabajara en esa empresa diría: por más brillante que sea yo, por mejor que sea yo, nunca voy a poder llegar arriba.
“En cambio, en Estados Unidos no sucede eso. 
“La mayoría de las empresas son corporativas. Los dueños no necesariamente manejan la empresa porque van a buscar a los mejores para los puestos directivos.
“Esto que estoy ejemplificando es una muestra de que los ingredientes de la receta son distintos. Al no tener los mismos ingredientes aunque se tenga la receta, el pastel o la sopa no será igual”. 
México expulsa a sus talentos
Al abundar en las diferencias de la receta, Rogozinski toca el tema de la fuga de cerebros en México, lo que ha sido evidente en distintas etapas:  
“Otra diferencia: Nosotros no fomentamos inmigración calificada.
“La gran mayoría de los países –lo estamos viendo hoy hasta con China– saben que no pueden generar toda la cantidad de cerebros que requieren para su economía. 
“Entonces, sobre todo Estados Unidos, hasta el 2001 ha tenido una política que fomenta la inmigración calificada. 
“Si vas a Silicon Valley te vas a dar cuenta que la mitad las empresas las hicieron inmigrantes calificados.
“Por ejemplo: Google. Uno de los dos fundadores  es inmigrante calificado. Los inmigrantes calificados han hecho un montón de patentes para los Estados Unidos.
“¿Qué pasa en México?
“México no ha querido atraer inmigrantes calificados. Y no lo digo porque hoy si lo hagan en materia de seguridad. México históricamente no ha querido traer inmigrantes calificados. 
“Lo ha hecho en dos ocasiones, pero no por razones económicas, sino por causas humanitarias. 
“Lo hizo cuando se instauró la dictadura en España y también cuando cayó Salvador Allende. 
“Los inmigrantes han hecho maravillas. 
“Los chilenos que llegaron a México a la UNAM fueron excelentes. 
“También muchos de los españoles. México no solamente no atrae, sino que expulsa. 
“Y con respecto a los muchos de los mexicanos que se van al exterior, que son muy brillantes, que se los llevan, ni siquiera tenemos una política para recuperarlos.
“Ahí tenemos otro elemento distinto de los Estados Unidos. 
“Si yo tengo ingrediente distinto, aunque se siga al pie de la letra toda la receta, el resultado es diferente.
“Es interesantísimo ver la diferencia en esto de los inmigrantes. En los Estados Unidos Henry Kissinger llegó como a  los 10 u 8 años de edad, y llegó a ser Secretario de Estado. 
“¡El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger con trabajos habla inglés!
“En cambio, en México, una persona que haya llegado, al segundo de haber nacido, al segundo, no a los dos minutos, al segundo de nacido, si no es mexicano por nacimiento no puede ser diputado, no puede ser gobernador, no puede ser senador, no puede ser secretario de Estado,  no puede ser un montón de cosas”. 
> ¿Cómo afecta la corrupción al crecimiento?
“La gente habla mucho de que tenemos mucha corrupción. Y sí la tenemos, pero a la hora de atacarla solamente se  están atacando los síntomas y no las raíces.
“Me explico. México además de tener mucha corrupción tiene aún más deshonestidad.
“¿Qué quiero decir con deshonestidad?
“Si me permites lo voy a leer directamente de aquí: corrupción y deshonestidad no son términos intercambiables. 
“La primera es el abuso de una posición pública para obtener ganancias privadas.
“Yo  tengo puesto público y lo utilizo para ganar dinero, para beneficiarme. Eso es corrupción. 
“En cambio la deshonestidad es la violación sistemática de las normas, sean públicas o privadas, se esté o no en función del poder, sea o no legal. 
“La gente tira basura en la calle, se tapan las coladeras. Viene una pérdida económica para el país. Ahí no hubo corrupción. Lo que hubo fue pura y llana deshonestidad.
“Y entonces me dicen:
”Ah, es que no hay una ley lo suficientemente fuerte para impedir que quien tira basura no lo haga.”
“Y yo les digo: El hecho de que una ley prohíba que la gente tire basura, y este acto sea castigado, no garantiza necesariamente que la gente no tire basura. 
“Te dicen: si aplicamos una ley fuerte la gente lo va a dejar de hacer.
“Si eso fuera cierto, en Estados Unidos, desde hace un rato la gente ya hubiera dejado de consumir drogas, hay muchísimos en la cárcel y cada vez hay más.
“La ley no funciona. 
“En cambio, en el mismo país, sin haber metido a una sola persona la cárcel, el consumo de tabaco va a la baja, por los cambios en la forma de pensar y en la cultura. 
“No digo que las leyes no ayuden, pero tienen que actuar en varios frentes.
“Si fuera cierto que la ley es lo que vale, entonces muchos de los pequeños traficantes mexicanos que pasan drogas a los Estados Unidos, pues dejarían de pasarlas, pero no lo hacen aunque sepan que en el ‘otro lado’ irán a dar a la cárcel si los atrapan.
> ¿Y los monopolios?
“Se repite mucho, sobre todo en los países desarrollados, los que crecen combaten a fondo sus empresas dominantes. 
“Si hay que seguir el ejemplo hagámoslo como lo hacen ellos. 
“Y es que en Estados Unidos efectivamente utilizan las leyes anti trust, pero solo cuando les conviene.
“Por ejemplo: Teléfonos de México tenía un 75 por ciento  de dominio cuando entraron  ATT y MCI  a México. 
“Esas dos empresas se quejaron en Estados Unidos que no avanzaban por el hecho de que Telmex era dominante y los aplastaba.
“Estados Unidos fue ante la Organización Mundial de Comercio y denunció esto. Puso una demanda contra México y contra Telmex, y ganó. 
“Está bien. No tengo problema en eso.
“Ahora hay que ver qué pasaba en los Estados Unidos al mismo tiempo. 
“Había otra empresa dominante, igual de dominante o más, pero a nivel mundial, porque Telmex lo era a nivel local.
“La empresa que te digo es a nivel mundial. Y es Microsoft. 
“Esta es una que me encanta, porque me podría decir: bueno Microsoft innova y hay que dejarla.
“De la que voy a hablar, no innova nada.
“Se llama Western Union. 
“Al mismo tiempo que Estados Unidos demandaba ante la OMC a Teléfonos de México, tenía ¡el 75 por ciento del mercado mundial de transferencias de efectivo!
“Con México manejaba la mitad de esas transferencias.
“Le cobraba a los paisanos 200 dólares , 25 o 20 dólares por montos pequeños, más 3 por ciento al cambio.
“¿Y los reguladores? Bien, gracias.
“¿Por qué? Porque no le convenía a los reguladores norteamericanos dictar una dominancia de una empresa que genera millones y miles de millones de dólares.
“Los norteamericanos no son tontos. Yo lo único que digo es: copiemos. 
“Tienen muchas empresas dominantes que no las van a tocar.
“Google, Facebook son las ITT de ahora. 
“Hay muchas más entre las que se encuentran: Amazon, las calificadoras, y Boeing, por ejemplo. 
“De ahí que es un mito que los países que crecen, del mundo desarrollado. “Sí las utilizan, pero solo cuando les conviene. Cuando no, se hacen de la vista gorda”.
¿Qué receta seguir? 
“Yo creo que parte de lo que falló es que en lugar de seguir nuestras propias recetas seguimos  recetas compradas. Y vuelvo al tema.
“Yo lo que digo al día de hoy es: dejémonos de tonterías y de querer hacer paellas si no tengo azafrán.
“Hagamos arroz a la mexicana con mariscos y puede ser mejor. Pero no la llamemos paella porque nos falta el azafrán.
“En lugar de decir por qué no hacemos A,B,C y D, mejor vayamos a la alacena y veamos qué ingredientes tenemos.
“¿Con qué nos podemos diferenciar?
“Por ejemplo tenemos un producto maravilloso y abundante. Tenemos una lata grandota que dice energía. 
“Hay muchos países que no la tienen, pero nosotros no la queremos usar."